Dermatología pediátrica

En nuestra clínica diagnosticamos y tratamos las enfermedades cutáneas más frecuentes de los más pequeños de la casa.

Dermatitis Atópica

La dermatitis atópica es una alteración de la piel muy frecuente en niños. Se caracteriza por piel seca y lesiones eritematodescamativas en placas pruriginosas. En lactantes suele afectar  la cara, el cuero cabelludo y las superficies extensoras de las extremidades, en niños más mayores las localizaciones predominantes son las flexuras de codos y rodillas. Se  trata de una patología crónica  de curso fluctuante, con recaídas y remisiones.

Es importante un tratamiento adecuado para acortar el  brote (normalmente con corticoides tópicos) y realizar un tratamiento “proactivo” para retrasar y disminuir el número de recaídas.

Verrugas víricas

Se trata de una infección vírica de la piel por algunos tipos del virus del papiloma humano (VPH). Pueden ser únicas o múltiples y localizarse en cualquier parte del cuerpo. Suelen ser indoloras aunque a  veces son dolorosas, sobre todo cuando aparecen en la planta los pies.

En nuestra Clínica disponemos de tratamientos eficaces para eliminarlas.

Moluscos contagiosos

El molusco contagioso es causado por un virus que es miembro de la familia de los Poxvirus.

Se trata de una infección común en niños. Aparece como pequeñas pápulas de color piel. Son indoloras aunque a veces se irritan y molestan. Y como su nombre indica son lesiones muy contagiosas por lo que es común que se diseminen y se extiendan rápidamente.

Hemangiomas

El  hemangioma infantil es el tumor benigno más frecuente en la infancia. Está causado por el crecimiento anormal de los vasos sanguíneos. Pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo aunque se encuentran más frecuentemente en la cabeza y el cuello. No suele estar presente al nacer, aparece a los pocas semanas del nacimiento y crece durante el primer año, sobre todo durante los primeros seis meses de vida. A partir del año empieza  a involucionar espontáneamente.

El tratamiento depende de la localización, de su progresión y del tamaño de la lesión.

Seguimiento de Nevus (lunares)

Los nevus son lesiones que se producen por la proliferación  de melanocitos, las células que producen el pigmento de la piel.

Gran cantidad de nevus se desarrollan durante la infancia y adolescencia y su número se estabiliza hacia la madurez. Pueden ser congénitos (presentes al nacimiento) o adquiridos.  La gran mayoría no requieren extirpación, pero si cambian o aparece una lesión distinta a las demás, lo que llamamos “el patito feo”, es importante  su valoración para descartar malignidad.

El seguimiento de lunares o nevus posee gran importancia desde edades tempranas para detectar de forma precoz una posible malignización.

Por ello es  aconsejable realizar un seguimiento periódico de estas lesiones,  al menos una vez al año.

Acné

Trastorno de la piel, que preocupa a la mayor parte de los adolescentes.   Se manifiesta como comedones, papulopústulas, nódulos o quistes que suelen aparecer en la cara, pecho, frente y espalda.

Puede desembocar en la formación de cicatrices, que afectan a la autoestima del paciente.  Por este motivo es importante establecer un diagnóstico y un tratamiento tempranos.

Nuestro objetivo es que  desaparezca cualquier foco inflamatorio así como evitar la formación de nuevas cicatrices y tratar las cicatrices existentes..

A parte de los tratamientos médicos en nuestra consulta realizamos peeling con salicílico, que actúa frenando el acné activo  y extraemos el contenido de los comedones  para desobstruir el poro.

Otro procedimiento que utilizamos para reducir el acné es la terapia fotobiológica  con luz LED azul y roja. El color azul actúa sobre las bacterias que provocan el acné destruyéndolas y el color rojo es un potente regenerador de la piel. Se realizan sesiones de 15 minutos  completamente indoloras. 

Para el tratamiento de las cicatrices utilizaremos el laser frax 1550 o el láser C02.